El transhumanismo y su secuela son el estadio final de la sociedad desvinculada, surgida de la razón secular (enlace), y su aceptación en el plano político, impulsado por esos agentes tan poderosos de la desvinculación que son la razón instrumental y el mercado. Parte además de una ventaja, la de no encontrar resistencia política porque la ideología de género ha destruido todos los limites relacionados con el deseo. Leer más.