La Librería Empúries de Girona acogió, el pasado 28 de febrero, la presentación del libro Als 25 anys del Concili Provincial Tarraconense. Amb fidelitat i amb llibertat, una propuesta de Aureli Ortín y Montserrat Coll que quiere dar voz a los participantes del Concilio Provincial Tarraconense de 1995. El libro ha sido recientemente presentado en Tarragona y en Barcelona.
El acto contó con las intervenciones de Mons. Francesc Pardo, obispo de Girona; la Sra. Dolores Puigdevall, directora de Cáritas Diocesana de Girona y miembro del CPT; M. Antoni Calvó, miembro del CPT; Mn. Aureli Ortín, coeditor del libro y miembro del CPT y el Sr. Marcelino López, como representante de la Editorial Claret.
Mn. Aureli Ortín habló del contenido de las aportaciones de los más de sesenta testigos que respondieron a la carta que enviaban, hace un año, él mismo y la Montserrat Coll (coeditora del libro), a todos los participantes activos del Concilio Provincial de 1995 . aparte de conmemorar los 25 años del Concilio, querían dar voz a todos los que habían sido protagonistas de aquel evento, preguntándoles si querían manifestar como lo habían vivido, que creían que faltaba para aplicar y qué sugerían, hoy, por la vida de la Iglesia de las diócesis con sede en Cataluña.
Añadió que los miembros que respondieron, participar significó «una experiencia eclesial extraordinaria, una responsabilidad y un privilegio». De los aspectos positivos en destacaron el esfuerzo coordinado de las diócesis para aplicar el Vaticano II, el trabajo preparatorio, la libertad de expresión oral, la convergencia a favor de los más pobres y marginados, y el marco de oración y de fe.
Dolores Puigdevall, miembro participante del Concilio, recordó la vivencia previa al evento como un momento álgido de reflexión, diálogo y movimiento. «El Concilio me hizo poner los pies en el suelo en cuanto al conocimiento de la Iglesia catalana y también viví momentos únicos de fe y eclesialidad» dijo. En el libro explica que el Concilio supuso una experiencia y visualización de formar parte de una Iglesia específica, la catalana.
Antoni Calvó, también miembro del Concilio, afirmó que para él había sido «una experiencia de aquellas que marcan, de aquellas difíciles de compartir por todo lo que supone» tiempo había sido «una gran responsabilidad». Coincidió con la Dolores en el hecho de que la fase diocesana fue una etapa muy dinámica e interesante y sugirió que había que releer el Concilio, revisarlo y actualizarlo.
Mons. Francesc Pardo, obispo de Girona, explicó que para él el Concilio había sido un acto de fe, un don del Espíritu Santo. «Convocar el Concilio, el trabajo diocesano, la celebración de las sesiones conciliares, las resoluciones y todo el conjunto no fue otra cosa que un don del Espíritu Santo» dijo. Añadió que el Concilio fue un acto de confianza en las posibilidades de nuestras Iglesias. «Se creyó en las posibilidades de laicos, religiosos y el clero de nuestras Iglesias» afirmó. Según él, el Concilio provocó un acercamiento de personas y significó dejarse interpelar por la vida de la gente.
Als 25 anys del Concili Provincial Tarraconense. Amb fidelitat i amb llibertat.
Jesús Montserrat Coll i Aureli Ortín
Páginas: 250
Libro en al web: https://bit.ly/2ssIIDW
Booktrailer: https://youtu.be/FleQVH8d6TI
Streaming: https://youtu.be/gYLjWf5YxEE