Resérvate el día 25 de marzo a las 19h. para la Asamblea de e-Cristians

Apreciados amigos / Apreciadas amigas:

Los socios ya habréis recibido la convocatoria para la Asamblea ordinaria de socios e-Cristians del 25 de marzo a las 19h. y que haremos telemáticamente. Recordad que para recibir el link para participar en la Asamblea, debéis confirmarlo a secretaria@e-cristians.net.

Esta es una Asamblea que irá con retraso porque deberíamos haberla llevado a cabo el año pasado. Como también teníamos que haber celebrado la gran cena de los 20 años de la constitución de e-Cristians. La pandemia lo alteró a pesar de que la esperanza de poder hacer una Asamblea presencial nos ha llevado a este retraso, que ahora ya no tendría justificación de prolongarse más. La importancia de esta Asamblea radica en que debe producirse la renovación de cargos y también porque debe ser el punto de arranque para la Asamblea extraordinaria y abierta que quisiéramos celebrar justo antes o después del verano.

Desde que comenzamos nuestra labor hace dos décadas, la situación ha cambiado notablemente y este hecho obliga a revisar el papel de e-Cristians. Cuando iniciamos nuestra acción de llevar a cabo la concepción cristiana a la vida pública, una de nuestras tareas posibles era la mediación con los partidos políticos porque la casi totalidad de estos tenían interlocutores políticos, unos más acogedores que otros, pero interlocutores. Ya hace algunos años que esto no es así y que desde este punto de vista la vida política es un yermo, y no solo eso, sino que afloran con fuerza beligerancias cada vez más intensas como lo demuestran estas cuestiones extraídas de los programas electorales de los partidos:

  • El muy gubernamental PSC proponía un pacto nacional por la laicidad que lo que significaba era eliminar toda referencia cristiana de las celebraciones y la vida pública, una ley de libertad de conciencia como si este capítulo no estuviera resuelto por la Constitución y las leyes del estado. A pesar de que eran unas elecciones autonómicas pedían suprimir la referencia a la Iglesia católica de la Constitución, denunciar los acuerdos con la Santa Sede. También postulan para dejar fuera de la escuela la formación en cualquier tradición religiosa, es decir, la católica y retirar los símbolos religiosos de los edificios públicos que, según y cómo se aplicara, significaría liquidar la capilla de Sant Jordi del Palau de la Generalitat y eliminar todas las pinturas y esculturas dedicadas a él que la pueblan.
  • En Comú Podem también apostaba por una ley de laicidad, la eliminación de la simbología religiosa de los actos y edificios públicos y la supresión de la retransmisión del culto religioso en los medios de comunicación públicos. También postulan que los representantes del gobierno no asistan a actos de culto o confesionales y la exclusión de la religión del currículum y expediente académico.
  • La CUP por su parte pedía la exclusión de la religión de todo centro escolar, fuera público o concertado, y acusaba a la escuela concertada de ser responsable de la segregación escolar.

Todo ello hace que sea necesario repensar cómo podemos servir mejor a nuestra fe en la vida pública. Más que nunca ahora lo que de ninguna manera puede ser aceptable es encerrarse en casa.

Este es el mensaje que quiero enviar esta semana y dejo para más adelante un análisis de la situación tras las elecciones. Sus resultados y los graves disturbios que han sucedido en la noche y madrugada del día 16 de febrero, el asalto a la comisaría de Vic añadido a graves problemas por los que ya atraviesa el país, configuran una realidad que exige una atenta mirada cristiana.

Entrades relacionades