Apreciado amigo/Apreciada amiga de e-Cristians:
e-Cristians no os dirá que votéis a estos o a aquellos otros, pero sí siempre, elección tras elección, os hemos ofrecido criterios, orientaciones, que no son fruto de nuestra subjetividad sino que resultan de la aplicación fiel de la doctrina social de la Iglesia. En esta ocasión ofrecemos a tu discernimiento el documento adjunto que desarrollamos. Se trata de un amplio texto con cuestiones que son importantes para la doctrina social cristiana y los remitimos a los partidos para que nos aportaran su punto de vista y el de su programa electoral. En el texto adjunto encontrarás toda esta información que te puede ayudar a hacerte una buena composición de lugar. Permitidme también una referencia personal, una reflexión que hice en mi último artículo en La Vanguardia sobre el papel de la política y los partidos, lo puedes encontrar aquí.
Dicho todo esto, puedo entender perfectamente, porque me pasa a mí, que a pesar de todo, se acerca el domingo y no sé a quién votar. Y es que tiene razón Monseñor Novell, obispo de Solsona, cuando escribió «no hay ningún partido del actual arco parlamentario, ni en el bloque independentista ni en el unionista, que asuma de manera más o menos completa las convicciones morales sobre la vida, las relaciones sociales y económicas propias del catolicismo».
Lo que sí tengo claro es que votar una y otra vez por lo que considere que es un mal menor se convierte, debido a la reiteración, en un gran mal, porque nos indica que nos encontramos ante una estructura de pecado en este caso institucional y política, que no permite que los cristianos ejerzamos con conciencia un derecho tan importante como es el de elegir políticamente. Y cada vez la cosa empeora más, porque lo que hay en las agendas políticas es la proliferación o el apoyo a medidas terribles, como es la eutanasia promovida por los socialistas y comunes, y a la que apoyan todos los demás partidos catalanes con la excepción del PPC y Vox. Y que nadie mal interprete esta referencia nominal porque solo expongo la realidad; esto es la verdad, porque tal como dice Jesús «solo ella nos hará libres» (Jn. 8, 31). Es importante oponerse a la eutanasia, pero seguro que no es una razón suficiente para optar por una opción política, si en otras cuestiones la concepción cristiana sufre. Pero lo que veo más difícil de compaginar es optar por aquellos partidos que impulsan o aprueban leyes y actuaciones contrarias. En este sentido, lo que hace Units, que se declara un partido humanista cristiano, y que ya ni siquiera aparece como partido en las papeletas del PSC, reclamando el voto para esta lista, que es también la de la ley Celaá y la de la eutanasia, me parece penoso.
En definitiva, si no tienes claro a quién votar, no te fuerces. En las actuales circunstancias la abstención es una forma bien válida de expresarse políticamente. Y si lo tienes claro, pero dudas porque consideras que es una opción testimonial, abandona tu duda y vota por lo que tu conciencia considera que es bueno, que es bueno no por una determinada ideológica política, no para frenar o apoyar la independencia, sino que es bueno para crear unas mejores condiciones para que crezca el Reino de Dios entre nosotros, porque esa es nuestra finalidad, nuestra bandera. Las demás, todas, caerán al polvo y quedarán consumidas como si nunca hubieran existido.
Finalmente, os informo que han comenzado las primeras actuaciones de la Asamblea de Asociaciones por la vida, la libertad y la dignidad, con un manifiesto dirigido al Senado que es donde se debatirá ahora la ley y en el que también se definen las primeras grandes iniciativas a llevar a cabo. Os recomiendo su lectura que puedes encontrar aquí.